¡Liberen a Hank Rhon!

¡Liberen a Hank Rhon!

Política ceroJairo Calixto Albarrán

Antes de que Poiré, que no Poirot, saque un video sobre los 10 mitos de Hank Rhon, las lenguas viperinas ya elucubran sobre la verdadera naturaleza del operativo contra una de las figuras más admirables del PRIcámbrico temprano.

Es increíble que nadie crea que el consentido del profe Hank pudiera tener 88 armas en su casa, como si la inseguridad en México fuera similar a la de Suiza. Además, ya dijo ese digno hijo del grupo Atlacomulco que las armas no son suyas, que le fueron sembradas por enemigos, que seguramente le tienen envidia porque toma mezcal de pene de burro, porta indumentaria que ha inspirado a La Familia Peluche y es una combinación de La Güera Alcaine y Catémoc Blanco. Además, la esposa del ex candidato al gobierno de Baja California asentó que su marido tiene los permisos hasta para poseer un acorazado si quisiera.

Hay quienes plantean desde quién sabe qué oscuras dimensiones metafísicas, que esto es la versión cachanilla del michoacanazo. Un golpe mediático para desprestigiar al tricolor rumbo a las elecciones del Edomex —oseáse una ayudadita al nada Bravo Mena— y de paso conformar una cortina de humo alrededor de dos temas que han mancillado al calderonato: las declaraciones francamente tropicales y sicotrópicas de Mr. Bean Cordero, aderezadas por esta maravilla que al calce afirma: “Con toda el alma quiero ser Presidente” (y todavía dicen que en México la poesía está fatigada); y las manifestaciones sobre los dos años de la tragedia de la Guardería ABC, donde la presente administración dejó constancia de su enorme sentido humanitario al defender primero los prestigios de un puñado de funcionarios y familiares, fundamentalmente a ese nini de altos ingresos llamado Juan Molinar Horcasitas. Su tesis de que en realidad todo fue un suicidio colectivo lo ha hecho casi tan popular como El Chicharito.

Digo, no está mal que, por fin, los blanquiazules hayan decidido apoyar a Luis Felipe, quien estaba muy forever alone. Pero si en lugar de apañar a Hank —que la verdad sólo interesa a Moreira, al grupo Atlacomulco y a la Femexfut que, con la llegada a Primera A del equipo de don George, Necio de Maria va a tener más broncas que Joseph Blatter— hubieran detenido a Molinar, el efecto habría sido de euforia. Sobre todo porque es fácil imaginar que lo del insigne contramaestre de la ludopatía Caliente en la patria va a estar más aburrido que el Tri contra El Salvador.

Igual y como dice @imoreno74 en Twitter, Hank Rhon sólo quería cambiarle el nombre a los Xolos de Caliente por el Arsenal de Tijuana.