lunes, 30 de mayo de 2011

Las medias verdades del comisionado migratorio

Las medias verdades del comisionado migratorio

Por: Salvador Camarena

SBR
El comisionado de asuntos migratorios, Salvador Beltrán del Río, en una visita a la frontera Sur. Foto tomada del sitio www.inm.gob.mx

Ya se sabe que los periodistas o no sabemos leer o leemos de más. Por eso no extraña que nadie hoy en México entienda qué hizo exactamente la semana pasada el comisionado migratorio Salvador Beltrán del Río. Con apenas 7 meses en el puesto, ese funcionario anunció el 12 de mayo el relevo de siete jefes delegacionales. La nación periodística mexicana pensó algo parecido a: "Por fin hacen algo en ese hoyo de corrupción que es el Instituto Nacional de Migración". Los periodistas habrían pensado otra cosa si hubieran leído bien los boletines que emitió el INM. O mejor dicho, los comunicadores habríamos informado mejor si hubiéramos exigido al bisoño comisionado explicaciones sobre qué exactamente hizo, porque hoy todo es confusión.

En este problema, de un lado tenemos crímenes completos perpretados por mafias que lo mismo secuestran, extorsionan, violan y matan. Ustedes elijan el ejemplo que mejor ilustre el altísimo riesgo que enfrentan los migrantes que intentan atravesar México para llegar a Estados Unidos: ¿les basta la denuncia de que 55 mil migrantes han sido secuestrados en México? ¿O prefieren recordar el caso de San Fernando, donde 72 sin papeles fueron asesinados en agosto de 2010? ¿Optan por las denuncias de abril pasado de que en Tamaulipas agentes del INM entregaban indocumentados a los criminales? ¿Acaso elijan el reporte de los dos camiones convertidos en latas de sardinas (con el perdón para los sardineros), vehículos detenidos en Chiapas y en los que eran transportados más de 250 personas en cada uno?

Por otro lado está la, así le dicen, autoridad: el INM con su comisionado Beltrán del Río. Las denuncias de que agentes del INM son cómplices de las mafias de traficantes de humanos son añejas, variadas y consistentes. Desde la matanza de San Fernando el año pasado, los mexicanos ya no pudimos obviar que ese problema con la migración estaba ahí y el tema es ahora una exigencia que tiene al gobierno contra la pared. Se cambió al comisionado (la anterior titular fue premiada y es hoy la número dos del Partido Acción Nacional). Y la semana pasada un diario tituló a toda pastilla: Purga en INM, tras tres años de denuncia (El Universal, 13 de mayo).

Qué dice la RAE del significado de "purga":

(De purgar).

1. f. Medicina que se toma para defecar.

2. f. Residuos que en algunas operaciones industriales o en los artefactos se acumulan y se han de eliminar o expeler.

3. f. Expulsión o eliminación de funcionarios, empleados, miembros de una organización, etc., que se decreta por motivos políticos, y que puede ir seguida de sanciones más graves.

Pues yo no hubiera tenido reparo alguno en titular igual que lo hizo El Universal. Ni más ni menos. Máxime que los removidos operaban en los estados por donde pasa la llamada Ruta del Migrante, camino del horror más bien. Pero si uno revisa diferentes entrevistas dadas a la prensa por Beltrán del Río es fácil concluir que está reculando. O no. También se podrá decir que los periodistas leímos de más. El comisionado Beltrán del Río ha aclarado dos cosas: 1) que esos señores removidos no son sujetos a sanción alguna y que de hecho uno de ellos ya colabora de nuevo con él. Y 2) que los únicos casos que se investigan corresponden a elementos de muy bajo rango, para nada se trata de indicios de que se están atendiendo los cuestionamientos que señalan que todo el sistema está podrido.

Aunque suene ocioso conviene recuperar los dos comunicados oficiales del INM para constatar que el Comisionado engaña con la verdad. Porque es verdad que en el primer documento, donde se anunció el "relevo de los titulares en las delegaciones regionales de Tamaulipas, Veracruz, Tabasco, Oaxaca, Estado de México, San Luis Potosí, así como en Quintana Roo, entidades altamente transitadas por los migrantes en su camino hacia la Unión Americana", nunca se menciona, señala, anuncia ningún tipo de investigación de esos señores y menos de acusación específica.

Sin embargo, en ese mismo boletín se informa que "los nuevos delegados tendrán como tarea inmediata el realizar una depuración del personal que labora en las mismas, el robustecer la operación migratoria con estricto respeto a los derechos humanos de los migrantes". En otras palabras, los cesados no depuraron sus delegaciones ni dieron robustez a las mismas. Suponemos que por ese motivo los cesaron. Es suposición porque en las entrevistas mencionadas el comisionado se ha dedicado a quitar responsabilidad a los removidos. Y es obvio preguntarse, entonces ¿por qué los cesaron?

No sabemos de las razones del cese. En un siguiente comunicado, del día 16 de los corrientes, el INM de plano los absuelve: "Respecto a los siete delegados que fueron removidos en la llamada “ruta del migrante”, aclaró que éstos no tenían nexos con la delincuencia y el crimen organizado". Uno pensaría, pues eran ineficientes nomás. Pero si anuncia que alguno va a ser recontratado... pues ya no queda claro nada.

Por cierto, como el INM habla de depurar, de nuevo la RAE:

(Del lat. depurāre).

1. tr. Limpiar, purificar. U. t. c. prnl.

2. tr. Rehabilitar en el ejercicio de su cargo a quien por causas políticas estaba separado o en suspenso.

3. tr. Someter a un funcionario a expediente para sancionar su conducta política.

4. tr. Eliminar de un cuerpo, organización, partido político, etc., a los miembros considerados disidentes.

Es cuestión de horas, y no exagero, el surgimiento de la próxima terrible noticia sobre migrantes en México. No se puede culpar de ello a quien apenas tiene siete meses con el encargo de resolver algo que se gestó en décadas. Pero mal camino toma Beltrán del Río cuando su primer gran medida para reformar el INM no la entendió ni Dios. Y mientras más leemos sus declaraciones, menos claro queda.

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