Adiós al polifacético Germán Dehesa

El escritor y dramaturgo murió ayer, víctima de cancer que él mismo había anunciado que padecía

Alida Piñón

El escritor y dramaturgo Germán Dehesa, reconocido por su labor social, su difusión cultural y sus posturas críticas hacia la clase política, falleció ayer alrededor de las 18:30 horas en su casa, víctima de cáncer, enfermedad que él mismo dio a conocer hace unos días en su columna La gaceta del Ángel.

El autor de obras como Adiós a las trampas, La familia (y otras demoliciones) y Fallaste corazón, además de seis obras teatrales como Borges con Música y El pórtico de las palomas, fue reconocido por diversas instituciones en los últimos días por su destacada
trayectoria.

El 11 de agosto pasado recibió por parte del Gobierno del Distrito Federal el reconocimiento de Ciudadano Distinguido, mientras que el Club de Industriales lo homenajeó el 31 del mismo mes por su trabajo en el mundo de las letras, la política, el arte y la cultura
universal.

Asimismo la Universidad Nacional Autónoma de México también preparaba un homenaje que se realizaría hoy en el Teatro Juan Ruiz de Alarcón, del Centro Cultural Universitario, en el que se esperaba la participación de la escritora Ángeles Mastretta, así como del escritor y comentarista político Federico Reyes Heroles, mismo que fue pospuesto hasta nuevo aviso.

Dehesa nació en la Ciudad de México en 1941, fue egresado de Ingeniería Química y de Letras Hispánicas de la UNAM, donde fue profesor por más de 40 años. Fue un personaje multifacético, lo mismo aparecía en la cinta Cilantro y perejil (1995) que como comentarista deportivo en un canal
especializado.

En 2004 escribió el texto Yo contra mí para la revista Fractal, donde aseguró que vivía entre dos mundos, el del gozo, el más fértil para la imaginación, el chistoso y del mundo jarocho heredado de sus padre; y por otro lado en el mundo michoacano, contrarreformista, feroz, un mundo en el que su madre le enseñó que “sufrir era un mérito importantísimo, pues estábamos en este valle de lágrimas para acumular, hagan de cuenta como puntos para viajar en avión, puntos para irse al Cielo”.

Para la crítica de teatro Luz Emilia Aguilar Zínser, el dramaturgo que montó gran parte de sus espectáculos en el desaparecido recinto Planta de Luz, fue un hombre que tenía un sentido del humor natural y que destacó en todos los ámbitos en los que se desarrolló. “Su obra era el pivote de descarga de la crítica política y social”, dijo.

El presidente Felipe Calderón Hinojosa y su esposa Margarita Zavala, externaron sus más sentidas condolencias a través de un comunicado y previamente por su cuenta en Twitter.

Francisco Blake, secretario de Gobernación, calificó como dolorosa la pérdida, mientras que la Secretaría de Cultura del Distrito Federal, a través de un comunicado, externó su pésame.

Los restos del escritor fueron velados en una funeraria de Félix Cuevas, para después ser trasladados a Tlacotalpan, Veracruz, informó su hijo Ángel.